El pleno del Ayuntamiento de Xixona ha aprobado por unanimidad de todos los grupos políticos la cesión gratuita a la Asociación Nacional de Heladeros Artesanos (ANHCEA) de una parcela de más de 2.000 metros cuadrados, situada en el polígono industrial El Espartal III, para que la entidad pueda construir allí el centro de investigación del helado artesano.
La alcaldesa de Xixona, Isabel López, considera que, con la cesión de la parcela, “se da un paso muy importante para reforzar y hacer más competitivo uno de nuestros principales sectores productivos que, junto al turrón, nos permite decir bien alto que somos el lugar más dulce del mundo”.
De hecho, como ha destacado la primera edil, “la nueva sede estará situada junto a otra entidad de referencia en Xixona como es el Consejo Regulador de la IGP Jijona y Turrón de Alicante, lo que facilitará que se establezcan sinergias entre dos grandes motores a nivel económico y social”.
Previamente, el pasado mes de julio, se había hecho efectiva la cesión del solar al Ayuntamiento por parte del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE), que era el propietario de los terrenos. El paso que se ha dado ahora era el último trámite necesario para que, a partir del próximo año, este centro de investigación, que será pionero en Europa, empiece a transformarse en una una realidad. El plazo máximo para el inicio de la actividad del centro es de cuatro años desde que se firmó la escritura de cesión de los terrenos al Ayuntamiento por parte del IVACE.
Las nuevas instalaciones estarán destinadas principalmente a la investigación en I+D y a la formación de los heladeros artesanos. Entre otros espacios, el inmueble incluirá un aula de formación de prácticas de heladería, un laboratorio de investigación, sala de documentación, almacén y salas de reuniones. Además del centro de investigación, el edificio albergará también la nueva sede de ANHCEA, cuyo presidente, Marco Miquel, ha estado presente en el pleno.
Xixona es el municipio que cuenta con más heladeros censados y son centenares de ellos los que, cada temporada de verano, se reparten por toda la geografía española para elaborar y vender helado.