Las obras servirán para consolidar un total de 30 metros lineales de muro y también se aprovechará para mejorar otras áreas como el circuito vial.
Las intensas lluvias que cayeron durante la primavera provocaron la caída de parte del muro situado junto a los columpios del parque municipal del Cuarnero, lo que obligó a cerrar esta zona ante el riesgo de que hubiera más desprendimientos.
Tras analizar los técnicos municipales las mejores alternativas con las que garantizar la máxima seguridad, el Ayuntamiento de Xixona dará comienzo próximamente a las obras para su reconstrucción, que tendrán un coste aproximado de 47.000 euros.
El proyecto contempla el levantamiento y consolidación de la parte afectada, unos 30 metros de longitud. Asimismo, se contempla un refuerzo especial con la construcción de una pared de hormigón y la recuperación del tipo de piedra original para garantizar la continuidad estética del muro.
La puesta en marcha de estos trabajos de reparación en el parque del Cuarnero no ha estado exenta de dificultad debido a la complejidad de las obras. “La caída del muro reveló problemas que no se veían a simple vista, por lo que hemos tenido que desarrollar un proyecto que va más allá de una mera reparación”, explica la alcaldesa.
Junto con la obra de reconstrucción, que se pretende finalizar antes del inicio de las clases en el mes de septiembre, el Ayuntamiento también llevará a cabo mejoras en otras áreas recreativas del parque, como el circuito infantil de educación vial.
El consistorio pretende así potenciar el uso del parque del Cuarnero como uno de los principales puntos de encuentro de los vecinos de Xixona. Junto con estas mejoras, la zona recibirá un nuevo impulso con la ubicación del Espai Jove, destinado a los colectivos juveniles de la localidad, que se hará efectiva cuando la biblioteca municipal se traslade definitivamente a la Casa Rovira.
Esta casa señorial del siglo XVIII ha sido sometida a un proceso de rehabilitación integral para su recuperación y uso como espacio destinado a la ciudadanía y está pendiente de ser amueblada, para poder utilizarla como biblioteca. “Siguiendo los plazos que nos marca la ley de contratos, esperamos poder inaugurarla antes de que acabe este año”, desea la primera edil.